Habitualmente se comienza con una dosis baja de 6 gotas diarias activadas, añadiéndolas a una botella de 1 a 1,5 litros de agua, durante los 3 primeros días; después se aumenta la dosis a unas 12 gotas activadas, añadiéndolas a una botella de 1 a 1,5 litros de agua, durante los próximos 4 días; después hasta 18 gotas diarias, añadiéndolas a una botella de 1 a 1,5 litros de agua, durante 7 días, y finalmente hasta 24 gotas, añadiéndolas a una botella de 1 a 1,5 litros de agua, durante un período de 7 días más.
La dosis diaria siempre debe tomarse a lo largo del día, dividida de 8 a 12 partes (pueden hacerse marcas en la botella). Es recomendable activar la dosis diaria correspondiente cada mañana, y añadirla en una botella de 1 a 1,5 litros de agua e ir bebiendo cada hora un poco, durante el resto del tratamiento, cuya duración estándar es de tres semanas, o el tiempo necesario de tratamiento, hasta que se sienta recuperado.
Si se experimentan náuseas, se reducirá la dosis al nivel anterior.
6 gotas 3 días en una botella de 1 a 1,5 litros de agua.
12 gotas 4 días en una botella de 1 a 1,5 litros de agua.
18 gotas 7 días en una botella de 1 a 1,5 litros de agua.
24 gotas 7 días en una botella de 1 a 1,5 litros de agua.
Cuanto más enferma esté una persona, más lento tiene que ser el aumento de la dosis.
Una gota activada de clorito sódico con el ácido equivale aproximadamente a 1 ml de CDS